Spaghetti Western: Almería Tierra de Cine

Desde 1951, cuando se rodó la primera película de ficción que se tenga constancia en paisajes almerienses “La llamada de África”, hasta la actualidad, han sido cerca de medio millar de producciones las que han escogido los escenarios naturales de esta provincia como el continente ideal para dar vida a su universo de ficción.

Hablamos de películas de todos los géneros: drama, histórico, bélico, aventura, terror, suspense, comedia, acción …..y entre todos estos, emerge con fuerza y distinción propia el western, las películas del oeste, como todavía son denominadas coloquialmente por muchos aficionados.

El western se erige en el género que mejor rendimiento ha sabido obtener del potencial paisajístico de la Provincia de Almería.

El principal responsable de esta realidad es Sergio Leone que, gracias a los cinco westerns que rodó en Almería, consiguió revitalizar este género convirtiendo a esta provincia en el mejor plató posible para verbalizar los argumentos del western europeo.

Es revelador el hecho de que tres de sus mejores westerns (La llamada Trilogía del Dólar) comiencen con escenas rodadas en localizaciones almerienses. En la primera secuencia de “Por un puñado de dólares» vemos a Clint Eastwood que llega junto a dos casas blancas: estamos en el cortijo El Sotillo, a la entrada de San José.

Antes de los créditos de “La muerte tenia un precio” vemos una vasta llanura de color amarillento-anaranjado con la Sierra Alhamilla al fondo.

En el primer encuadre de “El bueno, el feo y el malo” aparece a lo lejos el monte Alfaro, icono del Desierto de Tabernas.

Es por lo tanto en Almería donde el Spaghetti Western se reafirma y desarrolla extraordinariamente rápido gracias sobre todo a los primeros westerns de Sergio Leone, que película a película amplía y fomenta el uso de los escenarios naturales y también revaloriza la arquitectura y las estructuras rurales almerienses.

Es una herencia valiosa con la perspectiva del turismo de cine, fenómeno relativamente nuevo en expansión. Su pasado cinematográfico es riquísimo, con un número muy elevado de películas rodadas, no solo westerns, sino también otros géneros, algunas muy famosas y amadas por el público.

He aquí un elemento especialmente propicio para el turismo de cine: el hecho de ver tantas películas rodadas en un mismo lugar acaba por hacer que los espectadores se familiaricen con él e impulsa a los mas entusiastas a descubrirlo en persona, inspirados por el hecho de que allí tuvo lugar una historia, han actuado personajes con los que se han identificado, se han desarrollado acciones que suscitan un conjunto de impresiones, emociones, sentimientos.